Miguel Cabrera siempre ha sido una exageración. Entre otras cosas dispone de habilidad para batear, poder y mucha inteligencia. Esas herramientas le han permitido combatir al nivel excelso de lanzadores que lo han enfrentado desde las lomitas de los estadios de las Grandes Ligas.
Definitivamente es uno de los exponentes más potentes del beisbol, es tan impresionante verlo jugar que a veces no nos detenemos en los importantes logros estadísticos.
Cuando Cabrera conecte más temprano que tarde su hit 3000 se convertirá en el único, extraordinario, excepcional, distinto, especial, magnifico, superior a todos los peloteros que han jugado en las mayores ¿Saben por qué? Porque nadie ha conseguido conectar 3.000 hits, 500 jonrones y lograr una triple corona.
A partir de ese momento Cabrera será emblema venezolano, ya lo es, gobernantes del mundo entero podrían abrirles las puertas de las ciudades para mostrar su talento deportivo.
Miggy como le dicen los americanos, es tan bueno que hasta dandole mal a la bola termina conectando jonrones, hits y remolcando carreras ganadoras.
Cabrera hizo campeones a sus Tigres de Aragua muchas veces, también llevó a la Serie Mundial a los Tigres de Detroit y por supuesto tiene su anillo con los Marlins de Florida.
Con su gloria se acerca también el adiós de los campos de juego, pronto acompañará a Luis Aparicio entre los venezolanos inmortales, a pesar que seguramente cuando esta historia comenzaba, pocos pensaban que este maracayero dejaría de ser un hombre para convertirse en leyenda.
